DÍA 23: LA CONFIANZA EN JESÚS
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CITA BÍBLICA
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” Acerquémonos, pues, con plena confianza al trono de la gracia, a fin de obtener misericordia y encontrar la gracia de un socorro oportuno “.
Heb 4, 16
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REFLEXIÓN
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La base de nuestra confianza en que Jesús SIEMPRE nos ama y nos recibe con los brazos abiertos, no está en nosotros, sino en Dios.
En realidad, no nos acercamos a Él por lo que somos nosotros, sino por lo que Él es: Amor Misericordioso.
En forma general, nosotros nos comportamos con los demás de la misma forma como los demás se comportan con nosotros.
El amor humano tiene su base y motivo en el objeto que ama. Es más fácil amar lo bello, lo bueno, lo que tiene alguna cualidad que justifique nuestro amor.
Pero en Dios no sucede así.
La razón, el motivo y la medida del amor de Dios no están en las criaturas, no están en nosotros. Están en Él.
Por eso cuando cometemos alguna falta, lo primero que debemos de hacer es arrojarnos en los brazos de nuestro Señor, sí con dolor, pero también llenos de confianza, cuanto antes, sin perder la paz.
¡Cuánto tiempo perdemos en esta actitud de alejamiento después de una falta! Cuánto tiempo dedicamos a sentirnos culpables, miserables, menos valiosos! ¿Qué esperamos, si el único que puede purificarnos es Jesús?
Desconfiar es también juzgar a Nuestro Señor de una manera muy humana. Y no tenemos por qué hacerlo.
Él tiene para nosotros los brazos siempre abiertos.
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ORACIÓN
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Señor quiero vivir la prontitud de Tu búsqueda cuando te fallo, reviste mi vida de luz para comprender que la espera en buscarte solo causa dolor y soledad innecesarios.
Ayúdame a comprender en verdad que en donde abunda el pecado sobreabunda Tu Gracia.
Amén.
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RETO AGOV
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Lee y medita la parábola del Hijo Pródigo, (que muy bien pudiera llamarse, la parábola del Padre Misericordioso)
Lc 15, 11-32.
❤ ORACIÓN DIARIA ❤
Señor Jesús, que a través de Tu Corazón nos has revelado la magnitud de Tu Amor, acércate una vez más y escucha mi oración.
Sagrado Corazón de Jesús, mi alma entera agradece Tus bondades y consagra a Tu cuidado mis pensamientos, acciones y palabras.
Divino Corazón, confío plenamente en que mi oración a través de Ti llega al Padre y por eso hoy te pido seas Tú el reparador de mis pecados, quien proteja mi camino y el custodio de mi vida.
Amado Corazón de Jesús, Tú que tanto bien y refugio das a quien lo solicita, vuelve mi corazón dócil a Tu voluntad, humilde para tratar a mi prójimo y benevolente para incluir en mi oración, a todo aquél que no se encuentra en la oración de nadie, al alejado de ti y al mendigo abandonado.
Haz que viva en el amor, la verdad y la justicia, que mi búsqueda de Ti sea incansable, que mi corazón te siga pero al encontrarte, que el Tuyo me resguarde.
Amén.❤❤❤
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