DÍA 22: LA VERDADERA UNIÓN CON EL CORAZÓN DE JESÚS
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CITA BÍBLICA
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”Yo soy la vid, ustedes las ramas. El que permanece unido a mí, como yo estoy unido a él, produce mucho fruto”.
Jn 15, 5
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REFLEXIÓN
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Cuando a una rama se le caen unas hojas y tiene plaga, ¿cómo se cura? ¿No está esa rama en la unión con el tronco?
La misma savia que la rama recibe del tronco regenera las hojas que ha perdido, le renueva en su lozanía.
De la misma manera encontramos el remedio para nuestra separación de Jesús, para volver a estar unidas a Él.
Jesús derrama en nosotros el raudal mayor de Su savia divina que hace desaparecer todas nuestras deficiencias y apegos.
Cuando sentimos que nuestra conciencia nos remuerde, o que nos hemos alejado de Él, podemos arrojarnos en Sus brazos, entrar más íntimamente en Su Corazón, beber de la fuente inagotable de Su vida, simplemente amar… pues en lo más íntimo de Su Corazón está el remedio.
Santa Teresa del Niño Jesús expresa muy bien esta actitud de confianza cuando dice: “¡Ah! Siento que aunque tuviera sobre mi conciencia todos los crímenes, no perdería nada de mi confianza. Iría con el corazón hecho pedazos por el arrepentimiento a arrojarme en los brazos de mi Salvador; porque sé a qué atenerme respecto del amor y de su misericordia” (Cf. Manuscrito C, pág. 136)
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ORACIÓN
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Cuánta bondad hay en ti mi Señor, cuántas oportunidades de vida nueva nos das, gracias por las veces en que siendo rama enferma y deshojada me has vuelto a levantar.
No permitas que mi corazón se canse, que el miedo o la vergüenza lo hagan dudar. Sé Tú mi alimento, mi fortaleza, sé siempre mi paz.
Amén.
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RETO AGOV
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Imagina a Jesús siendo el tronco y tú una rama con sus hojas. Qué puedes sentir que recibes de Él?
❤ ORACIÓN DIARIA ❤
Señor Jesús, que a través de Tu Corazón nos has revelado la magnitud de Tu Amor, acércate una vez más y escucha mi oración.
Sagrado Corazón de Jesús, mi alma entera agradece Tus bondades y consagra a Tu cuidado mis pensamientos, acciones y palabras.
Divino Corazón, confío plenamente en que mi oración a través de Ti llega al Padre y por eso hoy te pido seas Tú el reparador de mis pecados, quien proteja mi camino y el custodio de mi vida.
Amado Corazón de Jesús, Tú que tanto bien y refugio das a quien lo solicita, vuelve mi corazón dócil a Tu voluntad, humilde para tratar a mi prójimo y benevolente para incluir en mi oración, a todo aquél que no se encuentra en la oración de nadie, al alejado de ti y al mendigo abandonado.
Haz que viva en el amor, la verdad y la justicia, que mi búsqueda de Ti sea incansable, que mi corazón te siga pero al encontrarte, que el Tuyo me resguarde.
Amén.❤❤❤
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