DÍA 20: EL PADRE CELESTIAL, PRIMERA PERSONA DE LA SMA. TRINIDAD.
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CITA BÍBLICA
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”Un Dios que es Padre de todos, que está sobre todos, actúa en todos y habita en todos”.
Ef 4, 5
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REFLEXIÓN
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Este carácter de hijas de Dios señala nuestra relación íntima con el Padre celestial.
A nuestro Padre nos debemos de acercar con una confianza plena, amarlo con una ternura exquisita, adorarlo con total postración y darle gracias constantemente.
“Den gracias por todo, pues ésta es la voluntad de Dios con respecto a ustedes como cristianos” (1 Tes 5, 18).
¿Cómo acercarnos al Padre con plena confianza?
Llevando en nuestras manos y en nuestro corazón a Su Hijo amado, Jesús, al Hijo de Sus complacencias.
¿Cómo no hemos de amarle con inmensa ternura, si estamos unidas a Jesús?
En cada Misa, cuando ofrecemos a Jesús al Padre celestial movidas por el Espíritu Santo, y en el momento cuando el sacerdote dice: “Por Cristo, con Él y en Él, a Ti, Dios, Padre Omnipotente, todo honor y toda gloria”, es justo lo que hacemos: estar unidas a Jesús, estar en Su Corazón.
Glorificar al Padre, es por consiguiente, satisfacer los deseos íntimos de Jesús, es consolarlo, es ayudarlo en Su empresa.
Por eso Él se complace en que lo ofrezcamos a Su Padre Celestial.
El quiere ofrecerse sin cesar, y para ofrecerse sin cesar realiza el prodigio de la Eucaristía.
Y para ofrecerse sigue pidiendo que nos unamos a Él cada instante de nuestra vida y en cada uno de nuestros actos.
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ORACIÓN
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Qué orgullo tan grande siente mi corazón al saberme amada como Hija del Padre. Ayúdame Señor Jesús a saber corresponder a ese amor y dirigirme siempre a Él con la misma confianza y amor con los que Tú lo has hecho.
Amén.
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RETO AGOV
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Hijo del Padre, como Jesús, dale gracias por todo lo que se te pueda ocurrir, hasta que te quedes sin palabras.
❤ ORACIÓN DIARIA ❤
Señor Jesús, que a través de Tu Corazón nos has revelado la magnitud de Tu Amor, acércate una vez más y escucha mi oración.
Sagrado Corazón de Jesús, mi alma entera agradece Tus bondades y consagra a Tu cuidado mis pensamientos, acciones y palabras.
Divino Corazón, confío plenamente en que mi oración a través de Ti llega al Padre y por eso hoy te pido seas Tú el reparador de mis pecados, quien proteja mi camino y el custodio de mi vida.
Amado Corazón de Jesús, Tú que tanto bien y refugio das a quien lo solicita, vuelve mi corazón dócil a Tu voluntad, humilde para tratar a mi prójimo y benevolente para incluir en mi oración, a todo aquél que no se encuentra en la oración de nadie, al alejado de ti y al mendigo abandonado.
Haz que viva en el amor, la verdad y la justicia, que mi búsqueda de Ti sea incansable, que mi corazón te siga pero al encontrarte, que el Tuyo me resguarde.
Amén.❤❤❤
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