BIENAVENTURADOS (DIA 3)
- Sangre de Cristo
- 7 ago 2019
- 2 Min. de lectura

DÍA 3: LA MISMA MONEDA
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CITA BÍBLICA
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”Por tanto tú, quienquiera que seas, no tienes excusa cuando juzgas a los demás, pues juzgando a otros tú mismo te condenas, ya que haces lo mismo que condenas”.
Rom 2, 1-2
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REFLEXIÓN
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Sabes muy bien que todos estamos inclinados a pagar siempre con la misma moneda.
¿Por qué no capitalizas ese instinto general?
Es decir, por ejemplo, si alabas a todos, aun en sus cosas más sencillas, si siempre tienes para todos palabras de comprensión y estímulo, si miras a todos con ojos de bondad y dejas que ellos brillen, no contra tu voluntad, sino contribuyendo tú a su brillo, puedes estar seguro de que los demás te pagarán con la misma moneda.
Tú también serás comprendido, serás ayudado, serás bien mirada, recibirás ayuda en todo momento y para todo.
O quizás ya no te sea tan importante!
Si te das a todos con plenitud, si sabes negarte satisfacciones para que las tengan otros, si tu gozo consiste en que gocen los demás, también recibirás la misma moneda y los otros querrán lo mejor también para ti.
Da y te darán; date y se te darán.
Si bien no debes hacerlo por esperar la recompensa, el Reino de Dios es ESE, donde todos se dan y se reciben.
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ORACIÓN
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Señor Jesús, quiero sentir el regocijo en mi alma al donar y donarme a los demás, que esa entrega sea desinteresada y si existiese algún agradecimiento o beneficio inesperado, mi corazón sepa recibirlo con humildad.
Ayúdame a tener siempre presente que soy testimonio de vida para aquellos a quienes amo y para el resto de la humanidad.
Amén.
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RETO AGOV
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Abre los ojos al ser y hacer de los demás. Felicita, agradece, alaba de corazón lo que otros saben hacer y su forma de ser.

💙 ORACIÓN DIARIA 💙
Bienaventurados las que se levantan contentos cada mañana, agradecidos por vivir un nuevo día, caminando hacia Ti, oh Dios.
Bienaventurados las que se perdonan a sí mismos sus faltas de atención, errores y caídas, abriéndose a Tu divino perdón.
Bienaventurados las que tienen ojos para ver la simple belleza de Tu creación y alaban sus manifestaciones.
Bienaventurados los que poseen oídos para escuchar el sonido de la lluvia, las risas, los momentos íntimos de sus propios corazones y Tu voz dentro de todas las voces.
Bienaventurados los que acogen el amor y el cariño de otros, recordando que en el amor de los demás conocemos el poder de Tu amor por nosotros.
Bienaventurados las que confían y creen que este viaje humano es un viaje sagrado, y que Tú, oh Dios, estás encontrándonos una y otra vez en nuestro caminar.
Mi vida entera te agradece todas las ocasiones en las que me he percibido Bienaventurado y hoy, con humildad te pido, derrames sobre mí Tu gracia para seguir reafirmando en este andar: que Contigo todo y sin Ti nada.
💙 Amén.💙
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