LUNES 24 DE JUNIO
SEMANA CATORCE
<< Cuando llegó el tiempo en que Isabel debía ser madre, dio a luz un hijo... El niño iba creciendo y se fortalecía en su espíritu; y vivió en lugares desiertos hasta el día en que se manifestó a Israel>> Lc 1, 57 - 66. 80
Señor, enciende en mí la llama del bautismo, transforma mi pequeñez en testimonio de tu grandeza. Dame perseverancia en la oración, en la penitencia y en la contemplación. Fortalece mi espíritu, para que en la aridez de la humanidad actual, sume mi voz a todas las que claman en el desierto.
En la semana catorce mi niño adoptado espiritualmente mide nueve centímetros y pesa 150 gramos, aparecen sus labios. María, te pedimos por su mamá. Tu cercanía, que hizo saltar de alegría al niño en el seno de Isabel, colmará su corazón con amor maternal y con la luz de la esperanza. Aférrala al deseo de que su hijo nazca, para que esos labios que hoy se forman, en el futuro sean la voz que lleven la Palabra.
Amén
Jesús, María y José, les pido por la vida del niño que he adoptado espiritualmente y que está en peligro de ser abortado (nombre espiritual del bebe).
Que pueda nacer tal y como yo he nacido, para vivir una vida como hijo de Dios, para amarle y servirle.
También les pido por su mamá y su papá. Intercedan ante Dios, para que les dé la fuerza que viene de Su gracia, y así transitar estos nueve meses, sintiendo Su presencia y amor.
Amén
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