LUNES 03 DE JUNIO
SEMANA ONCE
《Tengan valor. Yo he vencido al mundo》Juan 16, 29-33
Jesucristo, en un mundo que desfallece en la noche oscura del aborto, donde la tristeza y la desesperanza de los corazones sin Dios abren la puerta de la muerte; llene tu Espíritu los vacíos con esperanza, las angustias con alegría y los arrebatos con templanza; y a quienes rezamos por los niños en peligro, nos dé la fortaleza para confiar en ti, Señor y Salvador, que desde lo profundo de las almas nos recuerdas: "ánimo, yo he vencido al mundo".
En la semana once, mi niño adoptado espiritualmente mide 5 centímetros y pesa 7 gramos. Sus órganos han terminado de formarse y empiezan a funcionar. Su hígado produce bilis, el páncreas, insulina; los riñones, orina. El desarrollo de su tejido pulmonar es casi completo. Abre y cierra la boca. Puede tragar. Tiene ciclos de sueño y vigilia. Una carcajada de la mamá puede despertarlo. Ya nos revela su sexo. ¡Qué maravilla tu obra, Señor!
Amén.
Jesús, María y José, les pido por la vida del niño que he adoptado espiritualmente y que está en peligro de ser abortado (nombre espiritual del bebe).
Que pueda nacer tal y como yo he nacido, para vivir una vida como hijo de Dios, para amarle y servirle.
También les pido por su mamá y su papá. Intercedan ante Dios, para que les dé la fuerza que viene de Su gracia, y así transitar estos nueve meses, sintiendo Su presencia y amor.
Amén.
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