
JUEVES 30 DE MAYO
SEMANA DIEZ
《Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.》
Juan 16, 16-20
Jesús Resucitado, con qué delicada gentileza enjugas las lágrimas y prometes alegría! Envíanos a tu Espíritu, que su don de entendimiento abra nuestras mentes y las eleve al misterio de Dios.
Te pedimos Señor por las familias de nuestros niños adoptados espiritualmente. ¡Que los malos consejeros enmudezcan su voz! ¡Que se agoten las seducciones de muerte! Que por tu Espíritu hable la bondadosa comprensión, la tolerancia esperanzada y el amor.
Amén.
Jesús, María y José, les pido por la vida del niño que he adoptado espiritualmente y que está en peligro de ser abortado (nombre espiritual del bebe).
Que pueda nacer tal y como yo he nacido, para vivir una vida como hijo de Dios, para amarle y servirle.
También les pido por su mamá y su papá. Intercedan ante Dios, para que les dé la fuerza que viene de Su gracia, y así transitar estos nueve meses, sintiendo Su presencia y amor.
Amén.
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