top of page

Reto de Adviento (día 18 - Tercer Semana)

Foto del escritor: Sangre de CristoSangre de Cristo


Reto de Adviento (día 18 - Tercer Semana)

DÍA 18: AMABILIDAD

_______

CITA BÍBLICA _______

"Les doy un mandamiento nuevo: Ámense los unos a los otros. Como yo los he amado, así también ámense los unos a los otros.” Jn 13, 34

_______

REFLEXIÓN _______

Ser amable significa ser amoroso y digno de ser amado. Dios nos creó en el amor, por amor, a Su imagen y semejanza.

Vivir como hijos Suyos se resume en amar a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Pero de la misma manera que Dios nos creó en el amor, también nos hizo libres. Por lo tanto, somos LIBRES de amarnos los unos a los otros! Qué hermoso!!!

El problema viene, cuando haciendo mal uso de nuestra libertad DECIDIMOS no amar ni ser amados; no ser amables... lo habías pensado así?

Nacimos para amar; amemos!!! Seamos amables y mostremos a todos alrededor nuestro, cuánto nos ama Dios.

_______

ORACIÓN _______

Santísima Madre, tú que eres el vivo ejemplo de la amabilidad, y cargaste en tu vientre al Hijo de Dios, te pedimos que nos enseñes a ser amables con nuestro prójimo sin importar las circunstancias.

Concédenos siempre tener una palabra amable, una sonrisa dulce y un corazón amoroso.

Amén.

_______

RETO AGOV _______

En este día analiza tus actitudes hacia los demás. Si detectas que en algún momento no estás siendo amable (o podrías hacerlo mejor) corrige tu conducta: pide disculpas, observa a las personas para que notes cómo les gusta ser tratadas...


Reto de Adviento (día 18 - Tercer Semana)

ORACIÓN DIARIA

Señor, permite que vea esa estrella en el cielo que anuncia Tu nacimiento y me deje guiar por ella.

Crea en mí un corazón dispuesto a salir a Tu encuentro; que de los Magos de Oriente aprenda a salir en Tú búsqueda y, al encontrarte, reconozca que Dios mismo se ha hecho Niño, y postrándome te adore.

Señor, permite que contemple con un corazón humilde Tu nacimiento en el pesebre. Déjame aprender del silencio de María, de Tu desapego absoluto y de la admirable obediencia de José.

No dejes Señor que me levante sin haberte adorado; no me dejes inconmovible ante Tu llanto de niño.

Acepta este corazón que quiere entregarse a Ti y que necesita que nazcas en el y lo transformes. Déjame escuchar a Tu lado el arrullo de María y aprender a ser su hija, su hijo.

Si naces Tú hoy en mí y Tu Madre me protege, que más puedo pedir Señor? Ya nada me falta!!! Amén

© 2023 por Max & Elisa. Creado con Wix.com

bottom of page