
DÍA 6: EL VALOR DEL ARREPENTIMIENTO
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CITA BÍBLICA __________
"La tristeza que viene de Dios lleva al arrepentimiento y realiza una obra de salvación que no se perderá. Por el contrario, la tristeza que inspira el mundo provoca muerte" 2º Carta a los Corintios, 7
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REFLEXIÓN __________
Se requiere mucha humildad para reconocer los errores cometidos, disponerse seriamente a cambiar y reparar a los que hemos dañado con nuestras obras. Si no reconocemos esto, no podremos crecer como personas ni sostener relaciones confiables. Muchos creemos que los demás tienen que aguantar nuestros errores. No nos damos cuenta qué tanto duele la herida ocasionada en el otro. Normalmente buscamos la manera de justificarnos y parecer como víctimas. Estas excusas son como un insulto a la inteligencia del otro ya que el error y el daño cometido son evidentes. A veces también usamos un discurso bien elaborado para pedir disculpas, reconociendo nuestro mal actuar pero sin ofrecer un compromiso de luchar por cambiar o resarcir a quienes hemos herido. Sólo los fuertes son capaces de asumir lo que no hicieron bien y trabajar en corregirse. La vida exige la valentía de estar recomponiendo nuestro andar para responder de manera adecuada a los desafíos que se nos presentan. __________
ORACIÓN __________
Señor que grande es Tu amor por mí. Siempre tienes los brazos abiertos para recibirme con tu perdón. Me amas sin fijarte en mis caídas. Dame el valor de reconocer mis errores, la valentía de pedir una disculpa a la persona que he ofendido y la decisión de cambiar de rumbo mi vida para no repetir esos errores. Sobre todo dame la oportunidad de siempre volver a ti arrepentido y recibir con amor Tu perdón. __________
RETO __________
Revisa cómo estás actuando y ¿qué puedes hacer para mejorar? Es hora de ser mejor persona y de arrepentirte sinceramente de aquello por lo que has pedido perdón.

ORACIÓN DIARIA
Señor Jesús, ilumina mi vida con Tu luz y dame la gracia de creer en Ti con una fe alegre y gozosa, jubilosa y entusiasta, sea cual sea la circunstancia de la vida en la que me encuentre.
Una fe grande y profunda, que me ayude a superar los momentos difíciles.
Una fe valiente que me permita vencer todos los temores que invaden mi alma, que destruya para siempre los miedos que me acosan.
Una fe llena de esperanza, siempre joven, aunque los años pasen.
Una fe alegre que sepa reír y cantar, en medio del dolor.
Una fe contagiosa que motive, que entusiasme a otros a creer.
Una fe activa y creativa, que no sea sólo de palabras y promesas, sino una fe de obras.
Una fe perseverante, que no retroceda ante las dificultades, sino que crezca y se desarrolle en medio de ellas.
Una fe comunicativa, que se haga testimonio claro y cierto, de que creer en Ti nos trae dicha y felicidad. Y así Vivir a La Luz de la fe
Amén.